4.1.07

me gustaría escribirte en versos

4.1.07 1
ésta es una carta que escribí no hace mucho para una persona con la que me sentí muy bien, pero terminó por destrozarme al final. creo haberme recuperado y que solo quedó ésta carta como prueba de la historia.
no es lo que generalmente escribo, pero ésto mas que escrito fué vomitado entre sollozos de rabia.
no se me hubiera ocurrido volver a postearlo si no fuera porque lo encontré como póster en la casa de un amigo, que me dijo que le gustaba mucho.
si es así, también puede gustarle a alguien mas...


*-*

A veces me gustaría escribirte en versos.

Verte me provoca tanta molestia como ganas de besarte, tengo en la boca el gusto amargo de la indecisión.
Sería peor tenerte que no haberte visto nunca. Tu destino errante marca diferencias en las personas, estás hecha para acabar con nuestra cordura.
Quien te quiere no te puede poseer, odiarte es el requisito necesario para que ames caprichosamente a cual ser te haga daño.
Yo también te sueño blanca, y te deseo en las mil cartas que nunca pude escribirte, en los mil te amos que nunca te dije, en cada suspiro que nunca te voy a dedicar.
Me molesta conocerte. Con vos se ramificaron los mil y un sentimientos que desprecio: cariño, dulzura, asco, temor y lástima.
Cuanta belleza en tan ingenuo aspecto, tantas ganas de verte dejar de existir de una vez y dejar de un lado la preocupación de la lentitud con la que te extingues.

Te mataría con un secreto, con una mentira. Porque con la verdad no puedo.

Tendría gracia matarte dulcemente, tu estima, tu consciencia, tu personalidad, tu manera de no ser nada.
Me gustaría encontrarte arrinconada contra la pared llorando de lástima lamentando cómo violaron tu vanidad y te repetiría cuanto te lo dije entre golpes y besos. Destrozaría con mis dientes tu herida abierta y me daría cuenta con amargura que ya no hay mas sangre en tu cuerpo.

No hay vida dentro de ti.

A quién le importa ahora aprovechar tu cascarón estéril de vida humana, y dejar los restos de ideales animales que quedaron.
No hay orgullo en tu alma, no hay desprecio en tu odio.
Todo es supervivencia ahora, pensar en como no morirse con el poco aire que dejaron en tus pulmones.
¿Dónde guardaste tu alma demacrada para que nadie la desgarrara y con la que hoy mantienes tu cuerpo en pie?
No hay sonrisa que oculte tan tristes ojos. No me dejaste palabras dulces para decirte.
Tanta impotencia no me deja expresarte. No puedo escribirte en versos.
Tanta esperanza me dejó con el título de ser el último que te soñó blanca.

Debería matarte ahora.

Te deberían juzgar mil hombres para que no te dieras cuenta otra vez el valor de las cosas.
Palabras absurdas en cuentos de mil hadas, un mundo que cabe en un dedal y tus sueños mil veces en un sobre de postal.
Seguramente sea el cielo nublado que sienta tan mal con tu color de piel. Tal vez sea las casualidades que no concuerdan para encontrarte otra vez algo interesante.
Te odio o te amo, pero grises… te prometo que nunca mas.
Tanto talento para no ser nada, tanto talento para terminar siendo nada.
Ojos, piel, boca, senos, manos, pies.
Una máquina hueca de sentimientos sin experiencias. Una forma de vida absurda a la existencia.
De nada importa quién te trajo, de nada importa porqué estás, de nada importa.

Ser feliz también puede ser estar tranquilo. Ser feliz no incluye la alegría.

Es el olor a podrido. El sabor típico de los sueños rancios encerrados en la desesperación de no querer dejarlos ir nunca, de no aceptar cambios en tu mente.
Ya está: De nada vas a servir a este mundo, con nada vas ayudar a las personas. Todo ese talento lo vas a tirar a tu descendencia sin manual alguno.
¿Cómo se puede existir así? Y porqué te necesito entonces.
¿Ya no tengo nada mejor en qué preocuparme?

Y se me vuelven a ocurrir mil formas más de matarte.

Quiero que cada letra en ésta carta suene cruel, quiero que te lastime algo para saber si tus reflejos todavía funcionan.
Quiero saber que si te ahorco con mi odio, no vas a aceptarlo con la misma expresión en tus ojos. Que cada vez que alguien te apriete vas a defenderte con uñas y dientes.
No tiene sentido golpearte. Cuando el oponente no sabe defenderse no tiene el gusto de la competencia.
¿Cuándo escuchas música el sonido no resuena hueco dentro de ti? ¿Quedará algún brote de alma que tenga la energía suficiente para apreciarla?
Por más que intente atajarte, tu caída parece eterna y ese fondo tal vez no se encuentre tan lejos, tal vez no sea tan dura tu caída.

Mi odio es tu estupidez y la manera con la que aferras a lo totalmente perdido.

Mi amor es la cantidad de formas en la que serías perfecta si no tuvieras la capacidad de cometer tantas veces el mismo error.
Estoy muy por encima de ti, te atravieso con la mirada, y cada vez me esfuerzo mas por encontrar algo que me haga apreciarte. Que no haga que tenga que ubicarte en el mismo rincón en donde tantos perdieron la experiencia de compartir otro plano de los pensamientos. Me gustaría poder extrañarte.

Pero cuanto más te veo, mas extraño a cualquier otra.

Podría utilizarte como ejemplo de lo que no debo de hacer. Tal vez con eso pueda mantenerte viva en mis ideas por un tiempo más. Ya no encuentro forma de perdonar lo ilusa que fuiste y la manera en la que me dañaron tus caprichos.
Vas a caer en la misma bolsa a la menor oportunidad. Y voy a poder aprovecharme sin remordimientos de tu vacuidad.

Cien formas de no tenerte, así podría llamarse tu poema.

Tanto miedo al amor, tan absurdo tu cariño.
Ojala alguien termine de matarte y también lo conozca. Y me arrepienta de no haberte atravesado con el mismo puñal yo antes.
Ojala te encuentre acostada sin vida y llore cuántas veces tuve la oportunidad de que no me hicieras caso en nada. Y en ese momento te recite de memoria las cien formas de no conquistarte, entre ellas se encuentre la compasión, la humildad, lo correcto, la verdad y el amor verdadero.
Ojala te entierre con mil jazmines intentando perfumar el rancio de tus sueños. Y que todos los que apestaron tus sentidos estén al lado mío llorando con risas de anécdotas insólitas e ideales imposibles.
Ojala te tenga idealizada en mi mente hasta después de tu muerte, imaginando las formas en las que podría haber compartido tantas cosas que no te interesarían.
Que todos mis sueños sean tuyos, y en cada uno de ellos me tengas igual que ahora. Con la única manera de tenerte que tengo:
muerta.

Que admire cada vez más el cadáver de tus sueños y guarde en ellos el mejor de mis sentimientos ensuciándolos para que nadie más los quiera, para que ni siquiera puedas llegar a tenerlos en cuenta.
Ojala encuentres cien cartas como ésta y te arranquen lágrimas de sangre. Que cada momento en el que un sollozo estremece tu cuerpo me encuentre yo y con ello el mejor de mis deseos.

Que reacciones.
æ
 
æ blog ◄Design by Pocket, BlogBulk Blogger Templates